Amadas, odiadas o temidas por muchos, las suegras se han convertido en una fuente de humor para los chistes. Los chistes de suegras suelen ser contados por un personaje que hace de yerno por lo que también se pueden considerar chistes de yernos. Existen diferentes tipos de suegra, esta la suegra celosa y envidiosa de ver a su “niño” con su nuera a la que detesta o la suegra tóxica y la suegra manipuladora y controladora que se entromete en todo asunto familiar y su yerno no la puede ni ver. Pero por supuesto, también están las suegras buenas, aunque de ellas no se va hablar en los siguientes chistes sobre suegras, por lo que a las “suegras malas” serán a las que van dirigidas las gracias.
Yernos y nueras, suegras y suegros, a disfrutar y a reír en compañía, que no hay nada más bonito que la felicidad compartida en familia, así que contarle uno de los siguientes chistes a vuestra suegra, si os atrevéis…
LOS MEJORES CHISTES DE SUEGRAS
– Y tu suegra ¿cómo es?
– Bueno… si viviera en la India sería sagrada y si viviera en Inglaterra estaría loca.
– Pues, yo le debo a Italia los mejores momentos de mi vida.
– Pero, si nunca has estado en Italia.
– Yo no, pero mi suegra va todos los veranos.
– Si no fuera por el bigote, serías igualito a mi suegra.
– Pero, si yo no llevo bigote…
– Pero ella sí.
– Oye tío mi suegra es un ángel.
– Que morro… la mía todavía no ha muerto!
Decía el yerno:
– Mi suegra solo tiene un defecto… ¡respira!
¿Cómo se dice suegra en inglés?
Halloween.
¿Cuál es el vino más amargo?
Vino mi suegra.
– ¿Qué quiere que hagamos con el cuerpo sin vida de sus suegra? ¿Lo enterramos o lo incineramos?
– Las dos cosas. No quiero correr riesgos.
La suegra le dice al yerno:
– ¡No soy gorda! Lo que pasa es que soy talla L.
– Si suegra talla “L-fante”.
– Cariño donde has dejado el libro de «cómo pasar de los 100 años»
– Lo he guardado en una caja fuerte en el banco, no vaya a ser que a tu madre le de por leerlo.
Mi suegra tiene que hacer dieta. ¡Ayer despertó luego de dormir una hora en la playa y un grupo de green peace estaban intentando devolverla al mar!
– ¡Cariño despiértate! ¡Se está quemando nuestra casa!
– Vale cariño pero no grites o despertarás a tu madre.
– Antonio, hoy es el funeral de tu suegra ¿Qué haces trabajando?
– Primero el trabajo, después la diversión.
– ¿Pero de dónde vienes con todos esos arañazos y moratones?
– De enterrar a mi suegra.
– ¿Y qué ha pasado?
– Que ella no quería.
¿Qué diferencia hay entre una suegra y un terrorista?
Que con el terrorista se puede negociar.
– Se le acusa de matar a su suegra y a su perro, ¿qué tiene que decir?
– Que estaba fuera de control, yo no quería matar al perro.
– Bitácora año estelar 2019: El alien ha mudado la piel…
– ¡Ramiro cállate y recoge del suelo los pantis de mi mamá!
– Trae un palo.
– ¿Por cuánto me compras a mi suegra?
– ¿Tu suegra? Por nada.
– De acuerdo… trato hecho.
– Mira mi amor, una estrella fugaz, aprovecha y pide un deseo.
– Mmmm… ¡Ya!
– A propósito, mañana viene mi madre y mis hermanas.
– Si todo va bien, ¡no creo!
¿Cómo se dice suegra en ruso?
Estorba.
– ¿A qué juegas con tu suegra?
– A que yo lanzo objetos a las piscina y ella los busca.
– ¿Y esa tostadora conectada que hace ahí?
– ¡Cállate y espera a que se lance!
Pitonisa: – Veo en la bola de cristal que muy pronto va a morir su suegra.
– ¿Y no ve si me caerán muchos años de cárcel?
– ¿Oye, de qué se murió tu suegra?
– Pues, estaba cosiendo y se pinchó con una aguja y yo tuve que rematarla para que no sufriera.
– A mí me gustaría que mi suegra fuera una estrella.
– ¿Si? ¿Para que os llevase a Hollywood?
– No, para que estuviese a 3.000 años luz.
¿Qué diferencia hay entre una pila y una suegra?
Que la pila tiene un lado positivo.
El médico regaña al hombre:
– Pero ¿Qué le ha hecho a su suegra?
– Lo que usted me dijo doctor: Dardos tranquilizantes.
– ¡NO! Yo le dije: “dar dos tranquilizantes” ¡separado!
La suegra desde el interior del ataúd:
– Hija, ¡sácame de aquí que no estoy muerta!
Yerno:
– Cállese señora, ¿va a saber usted más que el médico?
– ¡Qué fea la Gárgola de esa fachada!
– Javier, ¿porque cuando mi mamá sale al balcón a despedirnos echas el mismo chiste?
El hombre le dice al forense:
– Vengo a donar los órganos de mi suegra.
El médico le contesta:
– Okey, ¿a dónde hay que ir a recoger el cadáver?
– ¡Ah! ¿Pero es que hay que esperar a que se muera?
– ¡Cómo te atreves a llamarme insensible! ¿Acaso no llamé al médico cuando tu mamá se estaba muriendo?
– Si, ¡pero para que no viniera!
– ¡Ah! ¡pero lo llamé!
– Querida esposa, ¿me puedes ayudar a describir a una araña?
– Pues, es un ser depredador, ponzoñoso, venenoso que paraliza a sus presas con su peor veneno y no da tiempo de reaccionar sino hasta que es demasiado tarde. ¡Ah! ¡y la mitad de su vida se la pasa tejiendo!
– Te pedí que describieras una araña, ¡no a tu madre!
Una pareja vuelve de las vegas y el hombre dice:
– Lo que pasa en las vegas se queda en las vegas.
– Nos olvidamos de mi madre.
– Por eso, se queda en las vegas, se queda en las vegas.
– ¿Su nombre?
– Adán
-¿Su esposa?
-Eva
-¡Increíble! ¿Por casualidad la serpiente esta por ahí?
– Claro que si… ¡SUEGRA!
¿SON MALAS LAS SUEGRAS?
Las telenovelas y películas tienen parte de culpa de esto. Las suegras no son malas (quitando algunas excepciones). En numerosas ocasiones hemos visto como en la televisión y en el cine, la suegra era la malintencionada y perversa protagonista. Si hay un conflicto entre la madre de tu pareja y tu, lo ideal no es el enfrentamiento, sino tratar de abrir la comunicación. Hablando y empatizando con la otra persona se solucionan la mayoría de cosas. Hablar de lo que realmente pasa, declarar tus sentimientos y evitar las acusaciones. Pero claro, los conflictos, aún ayudándonos con alguno de los chistes más buenos de suegras para intentar relajar el ambiente, siempre pueden manifestarse. A continuación veremos como evitar este problema.
CÓMO EVITAR LOS CONFLICTOS CON LAS SUEGRAS
Pues nosotros lo tenemos muy claro ¡Contándole los chistes de suegras de juesgosyrisas.com!
Es posible mejorar la relación con tu suegra si mantienes con ella una comunicación fluida, y mejor si añades algo de humor en ella. Numerosas son las nueras que comentan que “mi suegra esta celosa de mi” e incluso alguna han dicho “mi suegra me hace brujería”, esto es debido a que muchas suegras ven en la nuera a la mujer con la cual compiten por el amor de su hijo. Una madre siempre quiere lo mejor para su hijo y si la nuera no cumple los requisitos que la madre considera, es cuando puede surgir los problemas. También hay que decir que la suegra no es siempre la mala de la película, en ocasiones es la nuera la malvada. Hay suegras que dicen que “mi nuera no me deja ver a mis nietos”, provocando trifulcas y malas vibraciones en la familia.
El humor puede ser la solución a estos enfrentamientos. Romper el hielo con algún chiste de esta sección o de alguna otra, ayuda a iniciar una conversación pacífica. El yerno o la nuera o debe de ser muy clara cuando le diga las cosas y no esperar a que se acumule todo el enfado porque, puede ser, que estalle, se pierdan las formas de comunicar el mensaje, y la suegra se lo tome muy mal.
CHISTES DE SUEGRAS CRUELES
Una de las pruebas definitivas para comprobar si el conflicto ha desaparecido es contarle un chiste de suegras crueles. Se dicen que la mayoría de chistes de suegras son crueles pero si hay confianza entre suegra y yerno o suegra y nuera en vez de enfadarse, soltará una risa en la que se demostrará la confianza y conexión familiar existente. Cuéntale uno de los siguientes chistes cortos de suegras a ver cual es su reacción:
– ¡Suegra, la quiero como al buen vino!
– ¿De veras? ¿Conservada?
– Sí, ¡y guardada bajo llave! ¡en una bodega profunda! ¡oscura y fría!
– Suegra cómase esa comida podrida. ¿De qué le sirve tener sistema inmunológico si no lo va a usar?
– ¡Me quiero morir!
– ¡Yo también suegra!
– ¿Tú también te quieres morir?
– No. ¡Yo también quiero que te mueras!
– ¡Salgan todos del agua! ¡Hay un tiburón!
– ¿Qué han dicho?
– ¡Que el agua está muy buena suegra!
Un señor está triste y le dice un amigo:
– Oye, ¿Qué te pasa?
– Es que casi atropello a mi suegra.
– ¿Qué pasó? ¿Te falló el freno?
– No, ¡El acelerador!
– Suegra, la quiero como a la cerveza.
– ¿Cómo así?
– Sí. ¡Fría, con la boca abierta y echando espuma!
La suegra le comenta a su yerno:
– ¡Anoche soñé que me enterraban viva!
El yerno contesta:
– No se preocupe suegra, ¡Yo me voy a encargar que la entierren bien muerta!